Dialogo, descripcion del personaje y cuento

 

Dialogo

-        Ay, ¡que lindo que es!

-        Si, es muy bonito. Es tan lindo como los padres

-        Y, ¿hace muchos que lo tenes?

-        No, hace 6 meses nada mas

-        ¿Come mucho?

-        No, por ahora no come tanto. Es chiquito todavía

-        Y, ¿Dónde duerme?

-        Tiene su propia cama al lado de la nuestra

-        Y, ¿Cómo se porta?

-        La verdad que bastante bien, no tuvimos ningún problema por ahora, es bastante tranquilo

-        Que bueno, me pone contenta por ustedes

-        Si, la verdad que queríamos darle una alegría a los chicos y por eso lo adoptamos

 

 

Descripción del personaje

El personaje que me toco por puro azar para ser una persona ya entrada en años usa un tapado de piel y parece tener una cabeza bastante grande, aunque, a su vez, rellena de nada.

A este personaje, para que también siente una apreciación o simpatía por los gatos ya que aparece uno de color negro descansando sobre su cabeza.

Aunque el fondo de la imagen es totalmente blanco, creo que es una persona con una cierta aura oscura, quizás por los pájaros negros que vuelan en el fondo de la imagen o por la imagen que no logro descifrar que se encuentra en su cuello.

Por último, este personaje no tiene ni ojos ni boca, y solo le podemos observar sus pestañas y bigote como únicos rasgos de la cara

 

 

Cuento

Era una noche de viernes en un crudo invierno, por las ventanas se podían observar la intensa lluvia que caía desde hace rato. Nuestro personaje se encontraba en la biblioteca de su casa, sentado sobre un sillón, leyendo El gato negro, de Edgar Allan Poe, uno de sus cuentos favoritos. A su lado, sobre una pequeña mesa ratona, se encontraba un vaso de whisky con 3 hielos y un cenicero que poco a poco se iba llenando. En la misma habitación, sobre otro sillón, reposaba su gato de color negro, llamado Alfio.

La casa se encontraba en el barrio de Flores, en un vecindario bastante tranquilo.

En frente a la casa de nuestro personaje, vivían los García, una familia tipo clásica, formado por un matrimonio que ya tenia 10 años de casados y dos hijos, uno de 8 y otro de 2 y hacia menos de un año, habían adoptado a un perro llamado Nano. Los García mantenían una vida bastante tranquila, los adultos trabajaban mientras los niños iban a la escuela, los domingos al mediodía salían a pasear en familia y en enero se tomaban 10 días de vacaciones. Pero esa vida tranquila iba a cambiar esa noche.

Nuestro personaje, pese a la intensa lluvia que no cesaba, dejo salir a Alfio a que de su típica vuelta por el barrio antes de volver a la casa a dormir. Esa noche, mientras los García dormían, el gato cruzo por la terraza de su casa y se encontró con el perro de la familia. Apenas se vieron, se trenzaron en una pelea que termino con la vida de Alfio.

A la mañana siguiente, los García notaron que su nueva mascota estaba rasguñada y con algo de sangre en el lomo, no entendían muy bien el porqué, hasta que los padres subieron a la terraza y vieron que allí yacía el cuerpo del fallecido gato. Ante esta situación, los García se lo tomaron bastante mal, pusieron en Penitencia a Nano, metieron en una bolsa el cuerpo del gato y lo sacaron al frente de la casa junto a algunas bolsas de basura.

Nuestro personaje se levantó bastante tarde, se había quedado hasta altas horas de la madrugada leyendo y esperando por el regreso de Alfio. Pese a la espera, Alfio no volvió, este le llamo particularmente la atención ya que llovía torrencialmente y ante días así, Alfio prefería dormir en el hogar que se encontraba en la biblioteca.

Seguían pasando las horas y Alfio no regresaba, ante esto, nuestro personaje imagino lo peor, que Alfio había muerto. Lo podría haber atropellado un auto o cualquier cosa, pero nuestro personaje decidió pensar que era el perro de los vecinos que había matado a Alfio. No fue casualidad, nuestro personaje ya no soportaba a Nano desde su llegada al vecindario, decía que este ultimo no lo dejaba descansar por las noches por sus incesables ladridos.

Nuestro personaje tenía un plan, había comprado un pedazo de carne el cual iba a envenenar y se lo iba a dar esa misma noche al perro de los vecinos.

Cuando el reloj ya marcaba las 2:00 am, nuestro personaje decidió treparse a la terraza de los vecinos y ejecutar su plan. Los García se despertaron debido a los ruidos que escuchaban en su terraza, subieron y se encontraron al nuestro personaje al lado de Nano ya estaba fallecido. Con total impotencia, el padre de los García empezó a correr a nuestro personaje y este salto apresuradamente de la terraza, doblándose el tobillo en lo caída, lo cual no le permitía correr. El padre de los García lo atrapo cuando ya se encontraba sobre la vereda de su casa y llamo a la policía.

En unos minutos, la policía acudió al lugar y se llevaron detenido a nuestro personaje, aunque a las horas, nuestro personaje regreso muy tranquilo a su casa.

El episodio llego hasta las noticias, aunque ni medios de comunicación ni la policía, develaron la identidad de nuestro personaje y solo lo caratularon como “el asesino”. Ante esto, los García decidieron mudarse a otro vecindario, temiendo por el oscuro trasfondo de nuestro personaje.